sábado, 9 de febrero de 2013

Un desayuno paleolítico

Si ya has hecho una paleo compra y has limpiado tu cocina, ¿te animas a probar tu primer desayuno paleolítico? Pronto dejarás de echar de menos tu antiguo desayuno. A lo mejor era solo un café solo (¡cuanta soledad!) o a lo mejor un chocolate y un bollo, así que primero analicemos lo que suele desayunar un español cada mañana.

Un desayuno habitual en la dieta ¿mediterránea? de gran parte de los españoles es un café. Y nada más que un café. ¿Análisis? Muy sencillo: "Me acuesto tarde y/o duermo mal y me levanto cansado y con prisas. No me da tiempo de preparar nada más. El café me activa y cuando pueda hacer un descanso en el trabajo ya comeré algo." Todo esto suele muy habitual y son una serie de pasos erróneos. Al despertarnos deberíamos estar ya activos y es que además tenemos los niveles más altos de cortisol (la hormona del estrés), que nos debería bastar para empezar con energía. Al tener desequilibrado el descanso y las hormonas, echamos mano del café como droga, no como mera bebida.

La otra opción habitual es la de leche o café con un bollo o unas tostadas. Aunque las tostadas pueden parecer más sanas, no siempre lo son, sobre todo porque pueden ser de pan de molde o industrial o bien por lo que les añadimos encima. Esta opción también es el segundo apoyo de aquellos que solo toman café y esperan al descanso para comer algo más. Aquí la droga del café puede actuar como tal o ser inocua, dependiendo de cada uno. ¿Análisis? Café con azúcar, pan (azúcar), mermelada (azúcar). Mmmmm, ¡qué rico! Azúcar con azúcar con más azúcar. "Me encanta empezar el día con un café con tostadas. Es un desayuno dulce y nutritivo. Pero casi no tiene azúcar, sólo la cucharadita que le echo al café." Con un par. ¿Nutritivo? Eso nos hacen creer. Lo más nutritivo que podríamos encontrar es la mermelada, pero tengamos en cuenta que aunque proviene de la fruta, no es fruta. El procesado al que se somete la mermelada hace que se pierdan muchas de sus vitaminas, se concentre su cantidad de azúcar y por encima se añade aún más azúcar a modo de conservante, en el mejor de los casos. Con este tipo de desayuno descompensamos otra hormona, la insulina, provocando una subida por la mañana que luego traerá una bajada y el consiguiente deseo de comer de nuevo. Así se empieza la montaña rusa diaria de búsqueda de equilibrio de la insulina sin ser capaces de dominarla.

¿Te identificas con estos desayunos "sanos"? Nunca más. Ahora vamos a ver unas opciones que sí que son sanas y no te van a dar hambre a las 3 horas de haber terminado. Esto se debe a que serán altas en grasa. Por esta misma razón, la sabiduría convencional te dirá que no debes desayunar así. Pruébalo y me cuentas.

Café con huevos y bacon con una ensalada de colores. Es el típico desayuno paleolítico que verás como ejemplo en miles de ocasiones. El café únicamente en caso de que te levantes con energía, o estarás forzando el cuerpo. Los huevos y bacon aportan proteína y grasa para empezar el día, junto con vitaminas liposolubles. La ensalada añade vitaminas hidrosolubles, antioxidantes y minerales. Busca que haya distintos colores en ella porque significará una mayor cantidad de micronutrientes. Riégala con una cucharada de aceite de oliva virgen extra.

Té verde con un filete de salmón, brócoli y pimiento rojo y amarillo. Lo cubriremos también con con aceite de oliva virgen extra. Básicamente, si lo descomponemos, tenemos un desayuno similar al anterior. En este caso, además, el salmón es una gran fuente de omega-3. Puede que te choque pensar en desayunar algo así, pero en realidad nos hemos acostumbrado a que hay ciertos alimentos que son para el desayuno y otros para la cena. Esto no es cierto y tenemos que desaprenderlo.

Aunque gran parte de los paleo-seguidores practican el ayuno intermitente, eso lo comentaremos más adelante. De momento no cambiemos tantas cosas, sino que vamos a intentar alguna de las opciones anteriores. Lo mejor, más rápido y habitual es dejar sobras de la cena del día anterior. Esto es totalmente paleo, ya que en aquellos tiempos no había neveras ni latas de conserva o cafeteras que permitiesen preparar un desayuno en un pispás. Desayunar solía implicar comer lo que había quedado o bien irse a buscar algo que llevar a la boca.

Busca en internet porque encontrarás muchas otras recetas o inspiración. No soy fan de seguir recetas, sino más bien de quedarme con la idea y rehacerlo a mi manera. ¿Qué te parecen estos desayunos? ¿Has creado el tuyo propio? 

5 comentarios:

  1. Tortilla francesa-fruta-té me parece menos "impresionante" para empezar... ;)

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    1. ¡Tienes toda la razón! Sencillo y de fácil transición hacia lo paleo. Gracias por el aporte.

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  2. he leído lo del ayuno intermitente...y me parece interesante.
    yo soy la de te+una tostada por la mañana y en el trabajo a media mañana re-desayuno :) o simplemte lo hago en el trabajo y en mi casa no hago nada.en mi caso el problema es el tiempo, me levanto con el tiempo tan justo, que al final no me da tiempo mas que para hacerme una tostada,voy a intentar cambiarlo por fruta mejor no??? los huevos es facil hacerlos, pero no existe un limite¿¿ es decir es saludable desayunarlos todos los dias?? o 3 veces a la semana?? sino me hago un sándwich por la mañana y me lo llevo por el camino hacia el tren comiendomelo jeje, vamos todo pan pan pan, puede ser te+fruta+pavo???????????? eso creo que si que podriaaaa

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    1. Raquel, por supuesto que es mejor una fruta que una tostada en tu caso. La fruta es mucho más nutritiva e incluso la puedes comer de camino y no tienes que preparar nada. En cuanto a los huevos se ha dicho mucho y más aún se dirá. Yo soy de la opinión de que no hay que limitarlos tanto como nos quieren hacer creer. Lo "malo" de los huevos es que contienen colesterol y grasas saturadas, pero ya sabemos que esto no es un problema en sí. Y, por último, té+fruta+pavo = excelente. ¡Adelante! Claro que no se puede estar desayunando todos los días lo mismo, cada cual ha de encontrar sus mejores alternativas. Dentro de unos cuantos días hablaré del ayuno intermitente.

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  3. Yo he empezado hace poco, y nunca me ha gustado desayunar salado, así que intento buscar sabores suaves y cosas que requieran poca preparación. Mis tres opciones básicas son: tortilla de calabacín+café+ fruta a veces; jamón serrano+aguacate+cafe, pechuga de pollo a la plancha (calentada en el micro)+fruta+cafe.

    Lo de desayunar ensalada es demasiado duro para mi... jeje

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