domingo, 27 de enero de 2013

Lo convencional

En los círculos paleolíticos se suele hablar de lo "convencional" contrapuesto a lo que suelen ser las opciones consideradas correctas. Vamos a ver 3 casos y el porqué de cada uno:

-Sabiduría convencional. También llamada "creencias populares". Tenemos muchísimas creencias y gran parte de ellas son erróneas pero las aceptamos porque las hemos oído siempre. Por ejemplo, véase esta entrada anterior. Otros ejemplos de la sabiduría convencional dicen que hay que hay que abrigarse en invierno para no enfermarse. Quien me conozca sabe bien que casi nunca me abrigo y, sin embargo, es raro que me resfríe. Al abrigarnos damos calor a nuestro cuerpo impidiendo que el suyo propio se escape pero, a su vez, damos calor a los virus y bacterias que están más felices cuanto más próximos a los 36ºC se hallen. Por cierto, mi abuela, en Galicia, anda en invierno con un jersey fino y los hombros descubiertos. Tampoco se enferma nunca. Al vivir con la calefacción a todo trapo e ir de casa al trabajo sin pisar la calle en invierno, estamos yendo contra natura. El invierno también hay que vivirlo. Incluso hay beneficios por usar agua fría. En verano, lo mismo. Aire acondicionado y sombra, sombra, abanicos y más aire acondicionado. Es una locura. Nadie quiere estar expuesto al sol de mediodía en verano, pero recordemos por ejemplo el caso de la vitamina D. La sabiduría convencional también nos dice que comer grasa hace que almacenemos grasa y unas cuantas cosas más.

-Cultivo o cría convencionales. Es el opuesto de lo orgánico. Si bien lo orgánico debería ser lo habitual y, por tanto, lo convencional, no es así. Orgánico no es más que plantar cebollas o tomates sin más, o criar animales como la naturaleza predispone. Sin pesticidas, sin química, sin antibióticos, etc. Aunque existe la excepción de que se pueden utilizar pequeñas dosis en casos justificados, como que un ternero tenga una infección, por ejemplo. Cada vez que pienso en "orgánico" me viene a la mente lo absurdo del término. "Orgánico" es la excepción, pero debería ser la regla. Hemos corrompido todo. La dieta paleolítica apuesta por el consumo de productos orgánicos en la medida de lo posible, aunque todos sabemos que son más difíciles de encontrar y más caros.

-Medicina convencional. Se podría considerar parte de la sabiduría convencional, pero merece un apartado propio. La medicina convencional actual suele intentar ocultar síntomas antes que prevenir. Un ejemplo es el uso de antiinflamatorios. La inflamación puntual es necesaria y recomendable. Es una respuesta del cuerpo ante un estado transitorio que tiene que solucionarse. Es como reparar un coche. Considero que el gran problema no es de los médicos, sino de los pacientes, que pretendemos entrar en la consulta para solucionarlo todo sin esfuerzo. Si tenemos una infección de garganta nos tomamos unos antibióticos y santas pascuas. Es cierto que a veces puede ser necesario según la gravedad y las circunstancias de cada uno, pero el abuso se ha dado desde hace mucho tiempo. La medicina convencional, además, suele obviar que muchos de los problemas de salud son derivados de la dieta. Pueden ser carencias de vitaminas, escaso o excesivo aporte calórico, poca variedad, etc. La dependencia de los medicamentos en detrimento de un correcto consumo de alimentos nos está convirtiendo en sujetos débiles, incapaces.

Como vemos, lo convencional nos está alejando de lo natural, de lo que somos. Podríamos incluir una categoría de comida convencional, en la que englobaríamos todos los alimentos procesados que se han convertido en habituales. Mira tu despensa y tu nevera. ¿Cuántos paquetes de más de 5 ingredientes encuentras?

No hay comentarios:

Publicar un comentario